La Haya, Países Bajos – Sudáfrica ha intensificado sus acciones legales contra Israel ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), solicitando al tribunal que imponga medidas de emergencia adicionales que obligarían a Israel a retirarse de Rafah en la Franja de Gaza.
Esta solicitud es parte de un caso en curso en el que Sudáfrica acusa a Israel de cometer actos de genocidio contra los palestinos.
En una declaración emitida por el tribunal superior de las Naciones Unidas, se detalló que en enero, la CIJ ya había ordenado a Israel evitar cualquier acción que pudiera caer bajo la Convención sobre Genocidio, incluyendo garantizar que sus fuerzas militares no cometan actos genocidas contra los palestinos.
A pesar de estas órdenes, Israel ha sostenido que sus operaciones en Gaza están de acuerdo con el derecho internacional y ha desestimado las acusaciones de genocidio como infundadas, acusando a Sudáfrica de actuar como representante legal de Hamás.
Las últimas presentaciones de Sudáfrica resaltan la grave situación en Rafah, descrita como el «último refugio» para los palestinos en Gaza.
Según el gobierno sudafricano, las operaciones militares israelíes en Rafah no sólo suponen un riesgo extremo para los esfuerzos humanitarios y la supervivencia del sistema médico palestino, sino que amenazan la existencia misma de los palestinos en Gaza.
La solicitud de Sudáfrica ante la CIJ incluye una petición para que la corte ordene a Israel permitir el acceso sin obstáculos a Gaza a funcionarios de la ONU, organizaciones humanitarias y periodistas para facilitar la ayuda y la cobertura de la situación.
Los acontecimientos recientes observados por Sudáfrica incluyen el control del ejército israelí sobre el cruce fronterizo de Rafah, que efectivamente ha detenido la entrada de ayuda a Gaza durante varios días.
Esta situación ha exacerbado la crisis humanitaria en la zona, con cientos de miles de palestinos desplazados viviendo en condiciones terribles y un número significativo de víctimas reportadas debido a las acciones militares en curso.
La CIJ, a menudo denominada Corte Mundial, tiene autoridad para emitir fallos vinculantes y sin apelación, aunque carece de medios directos para hacer cumplir estas decisiones.
El tribunal normalmente falla sobre las solicitudes de medidas de emergencia en unas pocas semanas, pero deliberar sobre los aspectos principales de un caso puede llevar años.
Esta batalla legal en la CIJ es parte de una respuesta internacional más amplia al conflicto en Gaza, que refleja la compleja dinámica geopolítica y humanitaria en juego.
Mientras el tribunal considera la solicitud de medidas adicionales de Sudáfrica, la comunidad internacional continúa observando de cerca, esperando resoluciones que conduzcan a una disminución de la violencia y una mejora de las condiciones humanitarias en Gaza.