La semana pasada, la organización sin fines de lucro Heritage for Peace publicó sus hallazgos sobre el estado del patrimonio cultural de Sudán en medio de una guerra civil que comenzó el 15 de abril.
El informe fue elaborado por trabajadores y voluntarios culturales sudaneses y sin fines de lucro que trabajan con la Iniciativa de Protección del Patrimonio de Sudán de Heritage for Peace. Los investigadores revisaron la evidencia recopilada por civiles, organizaciones militares y trabajadores culturales y la distribuyeron en las redes sociales. El informe muestra que muchos museos, centros culturales y centros de investigación han sido saqueados, destruidos o cooptados como base militar.
Se han perdido varios archivos, incluidos los mantenidos por el Centro Mohamed Omer Bashir para Estudios Sudaneses en la Universidad Omdurman Ahlia y el Centro Abdul Karim Mirghani, que estaba en proceso de digitalizar su archivo de movimientos laborales en Sudán.
Reem Abbas, cuya familia donó la colección de la biblioteca del bisabuelo de Abbas al Centro Mohamed Omer Bashir hace diez años, lamentó la pérdida. en una publicación de Twitter. “Estoy tan enojado”, escribió Abbas. «¡Todo se ha ido! […] ¡Este centro tiene un archivo enorme y miles de libros valiosos! No puedo creer esto.
El Teatro de Artes Escénicas en el Geneina fue incendiado y tanto el Museo Sultan Bahruddin como el Museo Nacional de Historia en Jartum han perdido sus colecciones debido a los bombardeos.
Según informes de la Associated Pressla Corporación Nacional de Antigüedades y Museos de Sudán (NCAM) y el Centro Internacional para el Estudio de la Preservación y Restauración de Bienes Culturales (ICCROM) están trabajando juntos para organizar una estrategia de preservación que podría incluir la evacuación de artefactos.
“Aunque hay mucha conciencia sobre el patrimonio cultural y la necesidad de protegerlo en tiempos de crisis, uno de nuestros mayores desafíos es que la cultura aún no está integrada en el lenguaje de la ayuda humanitaria”, dijo Aparna Tandon del ICCROM al punto de acceso.
Documentar los daños a instituciones culturales y sitios que están en riesgo es un esfuerzo fundamental en tiempos de conflicto, ayudando a crear una base de datos que puede ayudar en la recuperación de obras saqueadas y la evacuación o protección de instituciones en riesgo y sus colecciones. Mientras Ucrania enfrenta pérdidas récord de patrimonio cultural, organizaciones como la UNESCO y el Ministerio de Cultura de Polonia capacitan a civiles para documentar pérdidas y compilar listas de objetos u obras de arte perdidos, algo que NCAM espera replicar.
1,7 millones de sudaneses han sido desplazados internamente, mientras que otras 528.000 personas han cruzado fronteras para escapar de la guerra, según a un informe por la Matriz de Seguimiento de Desplazamiento de las Naciones Unidas.