El 27 de junio de 2023, Sotheby’s London subastará «La dama del abanico» de Gustav Klimtcon una estimación previa a la venta en la región de $ 80 millones / £ 65 millones
Por G. Fernández – theartwolf.com · Imagen: Gustav Klimt, “Dame mit Fächer” (La dama del abanico)
En mi revisión personal de las subastas de arte en Nueva York el mes pasado, noté la ausencia de obras “superestrellas” en comparación con años anteriores, y mencioné que no había obras con un precio no solo de “cien millones de dólares”, pero no incluso una estimación previa a la venta por encima de los 50 millones de dólares. Bueno, las subastas de junio en Londres son, en ese sentido, un terreno totalmente baldío, si no fuera por la inclusión de última hora de “dama con un ventilador”, una de las obras más importantes de Gustav Klimt en salir al mercado en los últimos tiempos.
Considerado –junto con “La novia” – para ser la última obra pintada por Gustav Klimt antes de su muerte en 1918, y un candidato perenne para entrar en mi lista de las 200 pinturas más valiosas en manos privadas, “Lady with Fan” es un excelente y muy importante Klimt, que saldrá a subasta con una estimación de preventa de alrededor de $80 millones (£65 millones). En términos de importancia, puede considerarse superior a la “Bosque de abedules” que recaudó más de $100 millones en la ya legendaria subasta de la Colección Paul Allen en noviembre pasado, aunque esa tenía la ventaja de provenir de una colección de gran “pedigrí”. Aunque de menor escala, es mucho más interesante y relevante que el “Retrato de Mia Munk” subastado en 2010 por casi 19 millones de libras esterlinas. Sin embargo, no alcanza el nivel de los dos retratos de Adele Bloch-Bauer -ambos pertenecientes a la «época dorada» de la artista- vendidos por más de 100 millones de dólares en 2006 y 2016.
Se desconoce la identidad de la modelo en “La dama del abanico”, aunque existen varias teorías sobre quién podría haber sido el modelo. Sotheby’s señala que el “La noción trascendental de la feminidad, la eterna féminin, tenía una larga herencia, inspirando a generaciones de artistas y algunas de las obras más célebres jamás pintadas. Klimt abraza este ideal mientras lo moderniza. Sus mujeres son hermosas, y los retratos anónimos en particular son arquetípicos, pero sus representaciones están llenas de complejidad y matices. Sus mujeres transmiten carácter e independencia, mientras que sus cuerpos sugieren pasividad; sus semblantes ‘noli me tangere’ crean distancia, pero la suavidad de su piel evoca un erotismo latente. Estas son contradicciones que en muchos aspectos resumen la posición de la mujer en la sociedad vienesa de ‘fin de siècle’.”
Como en otros Klimt tardíos, el fondo de inspiración oriental en “La dama del abanico” tiene un significado especial (algo que, por cierto, podría ser de especial interés para los compradores asiáticos). En nota de prensa, Sotheby’s destaca que en esta obra, Klimt “da plena expresión a su completa fascinación por el arte y la cultura china y japonesa. Se sabe que los suntuosos kimonos de seda y las túnicas chinas fueron su vestimenta preferida, y en su hogar abundaban hermosos objetos de Oriente.“