Mientras que algunas personas se despiertan con un nuevo comienzo de semana el lunes, ¡otras no pueden evitar despreciar el terrible día que les espera a la larga semana! Y algunos incluso terminan en la sala de emergencias. ¡Sí, has escuchado bien! Según un nuevo estudio presentado en la conferencia de la Sociedad Cardiovascular Británica (BCS) en Manchester, es más probable que ocurran ataques cardíacos graves los lunes. Pero, ¿hay alguna razón específica por la que los ataques cardíacos sucedan más los lunes? Además, ¿qué tiene el comienzo de la semana laboral que parece poner nuestros corazones en mayor riesgo? Entendamos más sobre la intrigante relación entre los lunes y los infartos.
Entonces, antes de que entendamos la razón por la cual el corazón humano sucumbe al día más temido de la semana, sepamos más sobre el estudio.
El vínculo entre el lunes y el riesgo de ataques cardíacos graves
Después de examinar a más de 10.000 pacientes, los médicos del Belfast Health and Social Care Trust y el Royal College of Surgeons de Irlanda descubrieron que el tipo más grave de ataque cardíaco se llama infarto de miocardio con elevación del segmento ST (STEMI). Es una afección cardíaca que ocurre cuando una o más arterias coronarias que suministran sangre al corazón se obstruyen. Si no se trata, puede tener consecuencias nefastas.
Según el estudio, hubo un fuerte aumento en la cantidad de personas que sufrieron ataques cardíacos STEMI el lunes en comparación con otros días de la semana. Hubo un aumento del 13 por ciento en el número de casos STEMI al comienzo de la semana laboral. Si bien el estudio encontró que las personas tenían más probabilidades de sufrir ataques cardíacos los lunes, eso no significa que es poco probable que sufran ataques cardíacos cualquier otro día de la semana.
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¿Por qué el lunes aumenta la probabilidad de sufrir un infarto?
El estudio no encontró una razón particular por la cual las personas son más propensas a sufrir un ataque al corazón. Sin embargo, otros estudios han encontrado una relación entre el ritmo circadiano del cuerpo y un mayor riesgo de ataques cardíacos. Health Shots contactó al Dr. DK Jhamb, Director y HOD, Cardiología Intervencionista, Sanar International Hospitals, Gurugram, Haryana, para saber si hay algo de verdad en ello.
No se trata del lunes o cualquier otro día de la semana, sino de un aumento repentino en los niveles de estrés de un individuo. Después de un fin de semana libre, cuando regresa a sus trabajos sentado con estrés en su mente, es más probable que sufra un ataque al corazón. El estrés hace que aumenten el cortisol y otras hormonas, lo que a su vez hace que aumenten la presión arterial y los niveles de azúcar, un factor de riesgo de ataque cardíaco, dice el experto.
Lo mismo puede causar una mayor demanda de humo en los fumadores y conducir a frecuencias cardíacas más altas. El estrés prolongado y un aumento repentino del estrés son igualmente peligrosos para nuestros corazones, especialmente después de un largo fin de semana libre (Monday Morning Blues). El estrés adicional combinado con otros factores del estilo de vida, como fumar, la falta de actividad física y más, puede ejercer una presión adicional sobre su corazón y provocar un ataque cardíaco.
¡El equilibrio entre el trabajo y la vida es imprescindible!
No solo un ataque cardíaco, el estrés constante y la falta de equilibrio entre el trabajo y la vida personal pueden ponerlo en riesgo de contraer varias enfermedades. Numerosos estudios han arrojado luz sobre la importancia de lograr un equilibrio armonioso entre la vida profesional y personal. Trabajar en exceso o descuidar su salud física o mental no solo obstaculizará su productividad, sino que aumentará su riesgo de enfermedad cardíaca.
El experto dice que existe una gran necesidad de lograr un equilibrio entre el trabajo y la vida personal y controlar los niveles de estrés. Aparte de esto, aquí hay algunas cosas que puede hacer para mantener su salud en general bajo control.
- Coma una dieta saludable
- Haz ejercicio regularmente
- Manejar los niveles de estrés
- Seguir una rutina adecuada para evitar cambios repentinos
- No ignores los factores desencadenantes y trabaja en ellos.
Si bien esto podría ayudar a la mayoría de las personas, debe hablar con su proveedor de atención médica para saber si está en riesgo de sufrir un ataque cardíaco o no.