Y aunque China ha ahorrado miles de millones en petróleo y carbón rusos baratos, una guerra prolongada que no se garantiza que Rusia gane tampoco redundará en los intereses a largo plazo de China. Y un camino a la mesa de negociación de su “querido amigo” Xi podría ofrecerle a Putin una forma de participar en el proceso sin perder la cara.
El plan de paz de China en Ucrania fue visto casi universalmente como carente de sustancia, ambición y utilidad. Zelenskyy lo calificó de «interesante» para evitar insultar a China y alentar a Xi a participar más.
Esta llamada telefónica es el segundo esfuerzo de China para parecer relevante y útil. Con suerte, esta vez habrá un esfuerzo real y sincero por parte de China para ayudar a lograr la paz.
James Carouso es miembro principal y presidente de la Junta Asesora de Australia en el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, Washington DC, y ex embajador interino de EE. UU. en Australia.