África sigue siendo la región más pobre del mundo. Las razones de la pobreza en África no pueden reducirse a una sola causa. Algunos factores que acosan a África requieren una buena gobernanza y una formulación de políticas eficaz por parte de África. Sin embargo, algunas causas de la pobreza en África requieren una cooperación mundial para resolverlas. Las razones de la pobreza de África van desde la mala gobernanza, la corrupción, las guerras y la violencia. Además, la carga de morbilidad y la mala educación también contribuyen a la pobreza en África. Hemos desarrollado una lista de las ocho razones principales por las que África sigue siendo pobre.
Introducción
África ha experimentado algunos cambios económicos, sociales y demográficos en las últimas dos décadas. Las economías de África han estado creciendo constantemente. Cada año, las personas salen de la pobreza en algunos países. De cara al futuro, la historia de África muestra un futuro prometedor. Sin embargo, esta tendencia alcista no es consistente ni pareja. Sin duda, las cosas están mejorando para algunas personas, pero no para todos, y para algunos lugares, pero no para todos. África sigue empobrecida como resultado de este crecimiento desigual. Esta tasa de crecimiento es demasiado lenta y millones de africanos continúan viviendo en la pobreza extrema. África todavía se considera comúnmente como el continente más pobre del mundo. En el África subsahariana, casi 220 millones de personas viven en la pobreza. Las razones de la pobreza de África no pueden reducirse a un solo factor.
1) Gobernanza deficiente
El fracaso de África para progresar setenta años después de la independencia se debe principalmente a la mala gobernanza. África ha estado en manos de líderes ineptos que no están interesados en el desarrollo del continente. En las instituciones estatales ha habido falta de transparencia y rendición de cuentas. Los recursos no están siendo utilizados de manera eficiente. En África, la mala gobernanza incluye una variedad de malas prácticas estatales y de los empleados. Muchos líderes africanos no están realmente interesados en hacer avanzar al continente mediante el nombramiento de personas competentes para puestos clave. Los políticos africanos designan abiertamente a personas poco calificadas para puestos destacados en organizaciones estatales y ministerios gubernamentales, considerando sus funciones como una especie de propiedad y ganancia personal. Las personas más pobres se ven perjudicadas por este tipo de gobernanza, ya que se les niegan necesidades básicas como atención médica, alimentación y vivienda.
2) Corrupción
En África, la corrupción es un desafío clave en la lucha contra la pobreza. África subsahariana es considerada como una de las regiones más corruptas del mundo. Según un informe reciente de Transparencia Internacional, la corrupción está aumentando en toda África. Numerosos países africanos han enfrentado y continúan experimentando niveles severos de corrupción en los últimos 20 meses. África subsahariana es la región con el peor desempeño en el IPC, con un puntaje promedio de 32, lo que indica poca mejora con respecto a años anteriores. Según las clasificaciones de Transparency International de 2020, los dos países más corruptos se encuentran en África. Sudán del Sur y Somalia son los países más corruptos del mundo, con la misma puntuación más baja de 12. Una auditoría del gasto de COVID-19 en Sudáfrica descubrió precios excesivos, fraude y corrupción. En el segundo trimestre de 2020, dinero destinado a la compra de equipos de protección personal (EPP) fue robado en varias naciones. Por ejemplo, en Zimbabue en 2020 se descubrió un escándalo en el que se ofrecieron licitaciones para la compra de equipos a un empresario relacionado con la primera familia. Si bien algunos países africanos, como Ghana, Tanzania y Ruanda, han avanzado en la lucha contra la corrupción, muchos otros aún están muy rezagados. La falta de esfuerzos para abordar este problema exacerba las causas actuales de la pobreza en África.
3) Guerras y violencia
Las guerras y la violencia política han exacerbado la pobreza en África. Las organizaciones extremistas, la represión gubernamental y los recursos naturales son las principales causas de conflicto en África. Según el informe de Amnistía Internacional de 2020, África fue el único continente que experimentó un aumento de la violencia política en 2020 en comparación con 2019. Se documentaron más de 17200 incidentes violentos, con más de 37600 personas muertas. En 2021, los conflictos africanos ocurrieron principalmente en Camerún, Etiopía (Tigray), Libia, Malí, Mozambique, la región del lago Chad (Boko Haram), República Democrática del Congo, Somalia y Sudán del Sur. Según el Instituto de Estudios de Seguridad, un grupo de expertos con sede en Sudáfrica, desde 2011 ha habido un aumento en el número de personas obligadas a huir de sus hogares en África. En África, más de 32 millones de personas son desplazados internos, refugiados o solicitantes de asilo. Las actividades económicas, como la agricultura y la minería, se paralizan en comunidades violentas. La gente se ve obligada a huir de sus casas. Por la incertidumbre, los negocios cierran y los inversores huyen. Todo esto es perjudicial para el progreso económico y las comunidades africanas inseguras seguirán empobrecidas.
4) Educación deficiente y brecha de conocimiento
Un problema clave que se suma a las causas de la pobreza en África es la falta de educación. Este vacío se siente de manera más aguda en el África subsahariana, que tiene las tasas más altas de marginación educativa del mundo. Según el Fondo Internacional de las Naciones Unidas para la Educación de los Niños (UNICEF), más de una quinta parte de los niños de seis a once años no asisten a la escuela, seguidos por un tercio de los adolescentes de 12 a 14 años en África. Casi el 60% de los adolescentes entre 15 y 17 años no asisten a la escuela. Las Naciones Unidas han relacionado la educación con la pobreza, como ilustran los datos, porque las personas que no saben leer ni escribir tienen pocas oportunidades de encontrar un trabajo competente y de ganarse la vida. Debido a que no hay fuerza laboral capacitada para impulsar la economía, se ve paralizada por la falta de habilidades e información. Debido a la falta de educación y habilidades técnicas, la mayoría de los jóvenes africanos están actualmente desempleados. Sin embargo, se ha demostrado que la educación, en particular para las niñas, es una de las medidas más rentables para fomentar el crecimiento económico. Los estudios han demostrado que las madres educadas tienen recién nacidos más sanos y mejor alimentados y sus propios hijos tienen más probabilidades de asistir a la escuela, lo que ayuda a romper el círculo vicioso de la pobreza.
5) La mala salud y la carga de la enfermedad
La pobreza es tanto una causa como un resultado de la mala salud. Las condiciones de vida inadecuadas aumentan la probabilidad de mala salud. Como resultado, la mala salud limita a las comunidades a un ciclo interminable de pobreza. Las personas que viven en la pobreza están en seria desventaja debido a la falta de educación sobre cómo prevenir enfermedades infecciosas como la malaria y el VIH/SIDA, así como el alto costo de las consultas, pruebas y medicamentos, que solo sirve para perpetuar el ciclo de la pobreza. . En África, enfermedades como el SIDA, la malaria y el ébola son tanto la causa como el resultado de la pobreza. Las enfermedades se propagan más rápido y no se pueden tratar en muchas áreas debido a la falta de educación y atención médica inadecuada. La expectativa de vida promedio de la población está disminuyendo, mientras que el número de huérfanos está aumentando. La escasez de mano de obra es particularmente visible en la agricultura, lo que se traduce en una menor producción de alimentos. Las enfermedades, en particular las transmisibles, se propagan más rápidamente en las poblaciones desfavorecidas con acceso limitado a los servicios básicos. El VIH/SIDA, el cáncer y otras enfermedades contribuyeron al aumento de las tasas de pobreza en África. Además de matar a las personas, estas enfermedades endeudan a las familias y las comunidades, lo que compromete gravemente su capacidad de supervivencia.
6) Rápido crecimiento de la población
A pesar de varias iniciativas preventivas y educativas, el crecimiento de la población en el continente africano es rápido. Según un informe reciente de UNICEF, la población de África se duplicará a dos mil millones de personas para 2050. Los gobiernos africanos no logran satisfacer las demandas de una población en crecimiento al no construir la infraestructura necesaria. Con recursos limitados, la población per cápita está aumentando. La gente vive cada vez más en barrios marginales como resultado de la falta de vivienda. La escasez de agua y energía es común en África. Además, los centros de salud están saturados, lo que compromete los resultados de los pacientes. África está sembrando las semillas de su propia implosión al no poder satisfacer las necesidades de su creciente población. Sin embargo, la creciente población puede ser buena para la economía de África si los gobiernos africanos crean oportunidades. Para el año 2035, África tendrá la fuerza laboral más grande del mundo. La población en crecimiento puede sustentar la economía si se crean políticas para promover el desarrollo industrial.
7) Ayuda Internacional
La ayuda internacional ahora se considera comúnmente como uno de los factores que contribuyen a la pobreza continua de África. Nada ha cambiado mucho en los 70 años desde la independencia. Cada año, se proporcionan miles de millones de dólares en obras de caridad a África, pero poco ha cambiado. El dinero de la ayuda termina en manos de quienes se supone que no deberían recibirlo. Los déspotas utilizan el mismo dinero de la ayuda para oprimir al pueblo. La ayuda internacional fomenta la corrupción entre los gobiernos africanos. En su muy publicitado libro Dead Aid, Dambisa Moyo argumentó que la ayuda internacional podría llevar a los gobiernos a abdicar de su responsabilidad de proporcionar bienes públicos a sus ciudadanos. Los gobiernos y los políticos ya no serán responsables ante los ciudadanos si siempre son rescatados por el dinero de la ayuda. La ayuda internacional promueve un síndrome de dependencia y sofoca el ingenio africano. No habrá ningún incentivo para que los africanos presenten formas innovadoras de resolver sus problemas cuando siempre cuentan con la ayuda de los países desarrollados.
8) Políticas comerciales proteccionistas
Los países ricos establecen sistemas comerciales injustos al proteger sus mercados y subsidiar ampliamente su propia agricultura. El lento crecimiento de las economías africanas se debe a la política agrícola unificada de Europa ya los subsidios agrícolas de Estados Unidos. Esto dificulta el crecimiento de la agricultura en el continente africano, poniendo al continente en desventaja desde el principio. Como resultado de sus acciones, los gobiernos de los Estados Unidos, Europa y otros países ricos contribuyen a la pobreza en África. Estados Unidos y la Unión Europea están protegiendo industrias importantes con las que África puede competir, como la agricultura, lo que dificulta el comercio en este sector. Por lo tanto, África permanece atrapada en la pobreza debido a estas políticas proteccionistas de los países desarrollados.
Resumen
Aunque la perspectiva económica de África parece positiva a largo plazo, el continente sigue luchando contra la pobreza aquí y ahora. Hay una serie de razones por las que África sigue siendo pobre hoy en día, a pesar de los esfuerzos que se están realizando para erradicar la pobreza. El flagelo de la corrupción y la mala gobernanza está afectando el crecimiento de África y la oportunidad de reducir significativamente la pobreza. La inseguridad, la educación y la salud deficientes y el rápido crecimiento de la población también están arrastrando al continente hacia atrás. Con una formulación de políticas eficaz y una buena gobernanza, África tiene la oportunidad de alcanzar al resto del mundo.