Un tribunal laboral de Kenia dictaminó el lunes que Meta, la empresa matriz de Facebook, puede ser demandada en el país del este de África después de que un ex moderador de contenido presentara una demanda en su contra alegando malas condiciones laborales.
La demanda fue presentada por una persona en nombre de un grupo y también contra la empresa local de externalización de Meta, Sama.
Pide una compensación económica, una orden para que los moderadores subcontratados tengan la misma atención médica y escala salarial que los empleados de Meta, que se protejan los derechos de sindicalización y una auditoría independiente de derechos humanos de la oficina.
La decisión del tribunal de empleo y relaciones laborales de Kenia podría tener implicaciones en la forma en que Meta trabaja con los moderadores de contenido a nivel mundial.
La empresa estadounidense trabaja con miles de moderadores en todo el mundo, encargados de revisar el contenido gráfico publicado en su plataforma. Meta había argumentado que el tribunal de Kenia no tenía jurisdicción porque la empresa no tiene su sede en el país africano y, por lo tanto, debería ser eliminada del caso.
“Dado que la petición ha planteado ciertos problemas reales que aún no se han determinado, sería inoportuno que el país eliminara a los dos demandados del asunto”, dijo el juez Jacob Gakeri en su fallo el lunes.
Meta no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios. El ex moderador de contenido Daniel Motaung, quien dice que desarrolló PTSD debido a su trabajo, presentó el caso. Meta ha enfrentado demandas por moderación de contenido anteriormente.
En 2021, un juez de California aprobó un acuerdo de 85 millones de dólares entre Facebook y más de 10 000 moderadores de contenido que habían acusado a la empresa de no protegerlos de las lesiones psicológicas resultantes de su exposición a imágenes gráficas y violentas.
Meta también enfrenta otra demanda en Kenia. En diciembre, dos investigadores etíopes y un grupo de derechos humanos de Kenia presentaron una demanda acusando a Meta de permitir que florecieran en Facebook publicaciones violentas y llenas de odio de Etiopía, lo que enardeció la guerra civil etíope.
Meta dijo que el discurso de odio y la incitación a la violencia estaban en contra de las reglas de Facebook e Instagram, otra de sus plataformas, y que estaba invirtiendo mucho para eliminar este tipo de contenido.
La empresa local de externalización de Meta, Sama, manifestó el mes pasado que ya no brindaría servicios de moderación de contenido para la empresa.
Sama ha rechazado previamente las afirmaciones de que a sus empleados se les pagó injustamente, que el proceso de contratación fue opaco o que sus beneficios de salud mental fueron inadecuados.