Funcionarios iraníes han condenado la revista francesa charliehebdo y cerró un centro de investigación afiliado a Francia después de que el medio satírico publicara caricaturas de los líderes clericales religiosos del país en medio de disturbios civiles.
Las imágenes fueron publicadas en la edición reciente de la revista en torno al aniversario del tiroteo de 2015 en la oficina de París de charliehebdo, que había publicado una controvertida caricatura del profeta Mahoma. Doce personas murieron en este tiroteo.
Las últimas ilustraciones de la publicación muestran al líder supremo iraní Ali Khamenei y otros miembros del régimen clerical ejecutando a los manifestantes y participando en escenarios sexualmente explícitos.
Las caricaturas políticas fueron solicitadas por la revista en una convocatoria abierta que cerró a fines de diciembre. En su sitio web, el medio llamó a los caricaturistas “a apoyar a los iraníes que luchan por su libertad, ridiculizando a este líder religioso de otra época y consignándolo al olvido histórico”.
El medio francés pretendía publicar las imágenes en solidaridad con las manifestaciones de protesta que han sacudido al país tras la muerte de Mahsa Amini, de 22 años, bajo custodia policial. Había sido detenida por supuestamente no cumplir con las restricciones del código de vestimenta del estado para las mujeres; muchos han puesto en duda las circunstancias de su muerte, afirmando que se trata de un caso de brutalidad policial.
Desde que comenzaron las protestas por la muerte de Amini en septiembre, miles de manifestantes han sido arrestados y cientos han sido asesinados, según la Agencia de Noticias de Activistas de Derechos Humanos. Dos manifestantes detenidos por presuntos vínculos con la muerte de un oficial iraní durante las manifestaciones fueron ejecutados públicamente el mes pasado tras juicios a puerta cerrada.
En un comunicado publicado el domingo, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, Nasser Kanani, dijo que la libertad de expresión no debe usarse como un «pretexto para insultar» a la religión. El ministerio pidió a Francia que “haga rendir cuentas a los perpetradores y patrocinadores de tales casos de propagación del odio”.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán cerró el Instituto Francés de Investigación en Irán como su “primer paso” en respuesta a la publicación de las imágenes.
La ministra de Relaciones Exteriores de Francia, Catherine Colonna, defendió la libertad de prensa en su país y dijo que, según el sistema legal del país, “la blasfemia no existe”.