La NRMA ha emitido una nueva advertencia a los automovilistas antes del verano, instando a las personas a verificar que no hayan encerrado a ninguna mascota o niño en su automóvil.
La compañía de asistencia en carretera dijo que había respondido a llamadas al 4265 en las que un niño o una mascota habían quedado encerrados dentro de un automóvil en los últimos 12 meses.
La compañía dijo que en la mayoría de los casos, los conductores del automóvil habían dejado accidentalmente las llaves adentro.
La experta en seguridad vial de la NRMA, Dimitra Vlahomitros, dijo que la temperatura dentro de un automóvil caliente casi podría duplicar la temperatura exterior, y no tomó mucho tiempo matar a un niño o una mascota.
“Todos subieron a su automóvil después de un día cálido y sintieron el calor abrasador en el automóvil o la quemadura del cinturón de seguridad”, dijo la Sra. Vlahomitros.
“Es una receta para el desastre si un niño o una mascota quedan encerrados accidentalmente”.
La Sra. Vlahomitros dijo que los dos lugares más comunes a los que se llamó a la NRMA fueron las casas o los centros comerciales.
“Ya sea que esté llenando el auto de comestibles o para las vacaciones, asegúrese de saber dónde están las llaves y no deje las llaves con los niños para que jueguen mientras cargan el auto”, dijo.
Dejar a un niño desatendido dentro de un automóvil cerrado es ilegal y puede generar multas de hasta $22,000.
El año pasado, el entonces ministro de policía de Nueva Gales del Sur, David Elliott, apoyó la idea de que los ciudadanos pudieran romper el parabrisas del automóvil de un extraño, antes de la llegada de la policía o los servicios de emergencia, si la situación lo requería.
La advertencia de la NRMA se produce cuando se ordenó a un hombre de Townsville, Aaron Hill, que fuera juzgado por la muerte de Rylee Rose Black, de tres años, quien murió después de que la dejaran dentro de un automóvil caliente.
La madre de Hill y Rylee Rose, Laura Black, han sido acusadas de homicidio involuntario.
Los fiscales alegan que el niño pequeño estuvo abrochado en un asiento elevado durante unas cuatro horas en Townsville en noviembre de 2020.