AUSTIN, Texas – Red Bull y Alpine han sido convocados para ver a los comisarios después de que Haas presentara una protesta sobre ellos después del Gran Premio de Estados Unidos.
Sergio Pérez de Red Bull y Fernando Alonso de Alpine condujeron con autos dañados durante la carrera y se les soltaron piezas.
Pérez perdió el endplate del alerón delantero cuatro vueltas después de una colisión temprana con Valtteri Bottas.
El espejo del ala derecha de Alonso se cayó de su auto 26 vueltas después de una gran colisión con Lance Stroll que envió su auto por los aires. El auto de Alonso sufrió otros daños en ese incidente que fueron arreglados, pero el espejo no.
La FIA tiene una bandera negra y naranja para incidentes similares, lo que indica que un conductor debe detenerse para reparar un automóvil dañado.
El piloto de Haas, Kevin Magnussen, ha mostrado la bandera en tres ocasiones esta temporada, en Canadá, Hungría y Singapur.
En las tres ocasiones, Haas sintió que el castigo fue exagerado y que la parada en boxes que siguió arruinó su carrera.
Haas protestó Pérez y Alonso después de la carrera.
El domingo por la noche, la FIA consideró admisibles ambas protestas y convocó a representantes de ambos equipos para que vieran a los comisarios, lo que significa que podrían aplicarse sanciones retroactivas.
Pérez terminó la carrera cuarto, mientras que Alonso fue séptimo.