A partir del 4 de febrero de 2022, el Museo Rodin de Filadelfia presenta una exposición centrada en augusto rodin‘s (1840-1917) interés en forma de manos humanas.
Fuente: Museo de Arte de Filadelfia. Imágenes: Auguste Rodin, “Mano de Rodin sujetando un torso”, vaciado en 1917. Yeso, 15,9 x 22,9 x 9,5 cm. Imagen cortesía del Museo de Arte de Filadelfia ·· Auguste Rodin, “Los burgueses de Calais”. Modelado 1884-1895; fundido en bronce 1919-1921. 1,80m x 1,80m x 1,80m. Imagen cortesía del Museo de Arte de Filadelfia. Fotografía de Constance Mensh.
En una era de grandes artistas -desde impresionistas como Monet o Pissarro, postimpresionistas como Cézanne o Van Gogh, o realistas como Ilya Repin- la escultura no tuvo mayor genio que augusto rodin (1840-1917), una de las figuras indispensables del arte occidental, creador de obras tan célebres como “El pensador» o «Los burgueses de Calais“.
La exposición en el Museo Rodin en Filadelfia presenta la idea de que, para Rodin, las manos podían expresar emociones de manera similar a las caras, por lo que el artista concedió una importancia fundamental a la representación de la mano, realizando numerosos estudios de las mismas, y reutilizando a menudo en diversas obras modelos con los que se sentía satisfecho. En palabras de Jennifer Thompson, Curadora de la Colección John G. Johnson y el Museo Rodin de Filadelfia: “Las esculturas de manos de Rodin ofrecen formas útiles de entender su práctica y cómo utilizó esta parte del cuerpo para transmitir emociones y contar historias.”.
Varias de las obras de la exposición pueden haber sido creadas por Rodin como estudios (finalmente descartados) para su obra más compleja, la citada “Los burgueses de Calais“, llegando incluso a estudiar especímenes médicos únicos en el Musée Dupuytren de París. En concreto, el Museo de Arte de Filadelfia explica que científicos de la Universidad de Stanford han indicado que las formas de “La Mano Cerrada” coinciden con las contracciones musculares provocadas por la enfermedad de Charcot-Marie-Tooth.