Sophie Lauwers, directora general del Centro Bozar de Bellas Artes de Bruselas, murió a los 55 años el 29 de mayo en su casa.
Bozar dijo el miércoles que había muerto el 29 de mayo de una enfermedad. los Horarios de Bruselas informó más tarde que había estado luchando contra el cáncer de mama y que había continuado al frente del museo durante sus últimos días.
Lauwers se había ganado una sólida reputación dentro de la escena artística belga por su trabajo en Bozar, donde pasó un total de 20 años en una variedad de puestos. Había sido jefa del departamento de exposiciones antes de convertirse en directora general y directora ejecutiva el año pasado.
En su solicitud para el puesto más importante, que Bozar compartió en su declaración sobre su fallecimiento, Lauwers escribió: “El Centro de Bellas Artes de Bruselas es la institución que me transformó. Me enseñó a lidiar con la complejidad, a anclar creencias en un mundo en constante cambio y a seguir siendo eficiente en circunstancias cambiantes al aumentar mi adaptabilidad. … También aprendí a avanzar colectivamente y a ver la importancia de los matices en un mundo donde el consenso no se puede dar por sentado y donde la diversidad es una fortaleza, a pesar de todas las fricciones que a veces puede causar”.
Bozar, una institución artística interdisciplinaria que monta exhibiciones temporales y también alberga la Orquesta Nacional de Bélgica, es uno de los mejores museos de Bélgica y recibe 1 millón de visitantes por año, según las estadísticas de la institución.
En el museo, Lauwers demostró su capacidad para organizar espectáculos de gran éxito que atrajeron a grandes multitudes a las puertas de Bozar. En 2019, organizó una retrospectiva de Keith Haring en la que también apareció Tate Liverpool y el Museo Folkwang en Essen. Según los informes, unas 180.000 personas vieron el espectáculo, lo que lo convierte en la exposición más visitada jamás organizada en Bozar.
Otras exposiciones importantes de Lauwers se centraron en David Hockney y Michael Börremans.
Bozar dijo en su comunicado sobre la muerte de Lauwers que, por ahora, el museo estaría dirigido por su comité ejecutivo y su junta directiva.
“Bozar ha perdido a un líder experimentado y un colega inspirador”, escribió el museo. “Sophie siguió trabajando para nuestra casa hasta el final. Recordaremos su personalidad refinada, y como alguien que vivía la vida con pasión y mucho humor. Sacó fuerza de la belleza y el arte, una fuerza que irradiaba con una sonrisa”.