7 de junio: dos reclusos de la cárcel del condado dieron positivo por COVID-19 en un brote que se detectó el mes pasado en las instalaciones de Santa Bárbara, según informó el lunes una portavoz del alguacil.
El brote se detectó por primera vez en el Módulo de Vivienda Oeste de la Cárcel Principal, ubicado en 4436 Calle Real en Santa Bárbara, el 25 de mayo, cuando 20 reclusos dieron positivo por coronavirus, según la portavoz Raquel Zick.
Los dos reclusos adicionales fueron identificados durante el fin de semana. Un total de 22 casos están asociados con el brote de la cárcel principal, con 10 infecciones activas y 12 reclusos que se han recuperado, según Zick.
Zick dijo que un paciente que dio positivo por el coronavirus requirió hospitalización, mientras que cuatro reclusos informaron síntomas y 18 estaban asintomáticos.
Además, 14 reclusos dieron positivo por coronavirus en un brote detectado en la Unidad de Vivienda E de la Cárcel de la Rama Norte, cerca de Santa María, el 28 de mayo. De los reclusos infectados, seis reclusos se recuperaron y quedan siete infecciones activas, según Zick. Un recluso fue liberado, agregó.
Zick dijo que ningún recluso infectado en el brote de Northern Branch Jail requirió hospitalización, aunque nueve reclusos informaron síntomas, mientras que cinco estaban asintomáticos.
Los reclusos infectados se trasladan a celdas de presión negativa, mientras que el resto de los reclusos se colocan juntos en pequeños grupos, y los contratistas médicos de Wellpath los aíslan y monitorean, según Zick.
Zick dijo que los funcionarios de la cárcel consultaron con los funcionarios de salud pública del condado y suspendieron las visitas debido a los brotes. Además, agregó que la cárcel se está coordinando con la corte y la oficina del defensor público para ajustar las comparecencias ante la corte para minimizar la propagación del coronavirus.